sábado, 4 de abril de 2020

«Última noticia» y otros poemas


[por María Montserrat Bertrán]



Pájaros


La tormenta golpea la madera
libera los recuerdos por ventanas huecos hendijas

agitándolos
ellos
se filtran en la escritura
sigilosamente

ausente de otros vientos más apacibles
me fugo en la maravilla de la única ventana furiosa
que se abre libre, amarilla y roja como la rama que me espera

en esa mariposa de viento
mis pájaros sueltan un asombro que arde.


(de ‘Los jardines de la noche’, 2012)



La pausa


Hago un hueco.
Adentro es mejor para respirar
y echar luz por poros y raíces…

por una lluviecita que cae sobre mí,
la pausa vibra,
llega de un cuarzo blanco
y calma

aletea
como un colibrí.



Lo real es el silencio
                                                                         
                                                                 A Beatriz Vallejos


¿Es real mi oído escuchando el cuerpo de las palabras?

no

lo que toco de la piel del árbol
tiene todos los sentidos

lo real es el sonido de la hoja cayendo
y el sueño de su voz de invierno

despierto en los pájaros que duermen

y en la noche –espejo de tesoros y silencios infinitos–
bailo con el bambú agitador de tus palabras.



Última noticia

                                                 A John Lennon

Fue descubierto un punto oro rubí en el centro del corazón.
Se sabe que produce estrechez inseparable
en pares de opuestos.
Están confirmados:
cielo y tierra
noche y espejo
femenino y masculino…
Habría más.

Del par al Uno

Pudo comprobarse que la conjunción entre dichos pares
se disuelve cuando el punto oro rubí
trasmuta a semilla estelar.
Al poco tiempo,
la dorada semilla rompe su cáscara y traspasa todos los límites físicos.
Desatando tormentas que hacen temblar,
su polen vuela por rutas invisibles, y donde cae,
brota y florece.
Expertos, ángeles de laboratorio, dicen que
“el recordar y el despertar” del hombre
serían las pistas claves para dar con su verdadero origen.
Hasta el momento, la nueva especie no tiene nombre.


En el capullo


Hecha de cristalitos
la belleza escondida
se romperá lámina por lámina

hasta salir del capullo
frágil
a su cuerpo calidoscopio
le crecerán alas
le dolerán ojos

relampagueante
la desnudez
en alerta
ni antes ni después
en el justo tiempo
se abrirá
de par en par
al aire de su cuerpo
al aire de su flor.


(De «Los jardines de la noche», 2012.)



Mago

Hay un mago magnético
con poder de agua
derramándose en lo oscuro y pasado de mí


miro en sus ojos
y él me mira con dos gotas de lluvia

sus latidos de agua
caen en la fuente
mago
quetzal
ojo que ves
                  por la lluvia de dos gotas
que vienes a beber.



Nudos


Ay con ese nudo
que no puede decir
     
salvo en el brote
       y más tarde
en los azahares del limonero

ay con ese nudo
      del amor
      semilla
extrañando el fruto
del no tiempo
     del fluir
     en el ahora
     de la dicha.


La fuente


Por el bien de la sed
fuimos a bebernos
                             en la fuente

bajo la luna solar de enero
        piel sobre la piel
       boca en la boca

fuente donde el cielo baja y abreva
jubiloso

bebe
         de nosotros.



Humano resonante

Resueno como un diapasón

plena de una música infinita
vasija
dándome de beber
de beber dando
me vacío
sin tiempo
me vacío
y resueno.


(De «Los jardines de la noche», 2012.)



Inéditos

[Giro la cabeza]


Giro la cabeza
y veo la estación derrumbada,

a la vez –entre lágrimas– veo la brizna del pasto

y entonces, resueno con las palabras de Guillermo Hudson:
“es infinitamente mejor, ser a no ser”…

Ay la vida terrenal
reino sin la muerte que respira y pulsa

aire, insecto, reptil, juncos, pájaro, camalote, patos

verde azul húmedo, 
hondo
alrededor del sol

de la laguna
giro.

(2018)


[Ah ese pie clavado en la tierra]


Ah ese pie clavado en la tierra
y el otro que da un paso
y  lo espera

entre saber del borde
y del límite que no sabe
cuido del retoño de hierba
destello verdeluz que me quita la ceguera

Eros vuelve una y otra vez,
De un sueño antiguo viene…
Lo cuido
sin parpadear, en la humedad de mis ojos
lo alcanzo
ah el deleite
viajando en su carruaje de viento
El dulce-amargo
que llega.
 
(2019)




[No hay contradicción posible]


No hay contradicción posible
entre el mar de día y el mar de noche
marea alta y baja se acompasan

entre soles y silbidos de ballenas
por el aire que respiran
en un vientre oceánico e intemporal
humanos soñamos

adentro y abajo
una magna presencia
gestadora de algas, corales, peces multiformes, caracolitos

Ah el Susurro de los Susurradores de lo más profundo
embrión de la Palabra
que respiro y soplo
origen donde regreso una y otra vez
en un mar de noche
sobre un velero que es la Vía Láctea misma
clarísima
emergente del pavor solo y callado del mundo
doy en el blanco del día más claro
en un mar de día 
sobre su dorada orilla
soberana.

(2019)

                      A Alberto a. Arias



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